A la perpetua memoria de Dios, para regir y fomentar la religión de los fieles, invocados las preces celestiales de la iglesia a todos y cada uno de los fieles de Cristo, de uno y otro sexo, que hicieren penitencia, y confesaren sus pecados, y se fortalecieren con la Santa Comunión, que entrase en la iglesia capilla pública de la Bienaventurada Virgen María, llamada de Miravalles, de la parroquia de San Martín de Soto de Aller, diócesis de Oviedo, el ocho de Setiembre y el trece de Marzo, y en estos días, desde las primeras vísperas hasta el ocaso del sol, en cada año, entrasen piadosamente y allí orasen por la concordia de los príncipes cristianos, extirpación de las herejías, y exaltación de la Santa Madre Iglesia, cada día en que esto hicieren, concedo indulgencia plenaria a todos los pecados, además de dicha gracia, implorada la misericordia de Dios, también concede a los fieles de Cristo, que confesados y fortalecidos con la Sagrada Comunión, visitasen dicha iglesia o capilla pública, una vez al año en el día que se señalaría, y orasen, como arriba se indicó, siete años y otras y otras tantas cuarentenas de perdón en la forma acostumbrada, ya se trate de penitencias impuestas, ya de las que pudieran imponer en cualquier tiempo.
Amigos, quien sepa algo de esto, se que existe otra bula en este Santuario, concedida a la Cofradía de Animas de dicho lugar, si alguien tiene conocimiento de ello, le rogaría se comunicase conmigo. Me gustaría hacer una copia y ponerla en el Santuario.
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